Mi vida: un mar de inocencia, un mar de olas de grandes crestas, y un océano apacible. Mi vida, un callejón sin salida. Mi vida, camino con fin inminente. Mi vida, la arena del desierto. Mi vida, un enjambre de perversión. Mi vida, un semblante apático. Mi vida, el perro que ladra y el gato sigiloso. Mi vida, un desorden de cafés, arroz integral, colesterol, cervezas, licores y chocolates.
Mi vida, un anhelo que no se concreta pero que se le acaba el hilo. Mi vida, una sucesión de bostezos que no son. Mi vida, una arboleda de sentimientos ocultos en sus troncos. Mi vida, un sueño eterno.
Mi vida, una campana de Gauss, un ciclo de ciclos. Mi vida, una caja esperando a ser abierta.
Mi vida: muchas vidas.
¿Mi vida? Una vida más del reparto, carajo.
(Texto de mierda de una locura de madrugada, en que sufrí una recuperación súbita y radical tras una semana de pura apatía)
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PALOMAS MENSAJERAS